• Recibirte al llegar a casa tras un día duro de trabajo, a punto de quitarme el maquillaje y los zapatos, mas escucho el timbre y se me eriza la piel. Me acabas de dar mis últimas energías.

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  • Entonces, si su cuerpo se pone nervioso en el momento en que te ve, probablemente se engañará a sí misma pensando que es su corazón el que está respondiendo. Y, como siempre y en todo momento con las mujeres, donde desee que vaya su corazón, el cuerpo lo sigue.

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  • Después de este juego, después de tener mis pechos doloridos absolutamente siguió apretándolos, mordiéndolos, tirando de ellos y azotándolos hasta que decidió que ya tenía bastante y le puso fin. Yo me comporté como una jabata, lo que hace el orgullo…

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  • Ashley interpreta equivocadamente que te estás hundiendo como un retiro, lo que duele su orgullo, y ella también se retira. Vaya, dejas que un momento de incómodo silencio caiga. Llena el silencio, ¿recuerdas?

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  • Tristemente (en contra de todas las comprobaciones científicas) la sociedad ha ido forjando una serie de mitos que, si no sabemos distinguirlos de la realidad, nos llevan a la frustración más horrible… a hombres y mujeres por igual.

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  • Incluyen a aquellos varones que nunca han conseguido una erección adecuada, como sucede con ciertas malformaciones y en ciertos tipos de traumatismos o cirugías que ocurren a temprana edad y lesionan de manera notable los órganos sexuales.

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  • Me escogieron presidente de la escuela, cuenta. Me tenían en buena estima. Conseguí una beca para la Universidad Ucla. Si me hubieras conocido entonces, hubieras pensado: ‘quiero darle a este muchacho una beca.

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  • Contáctame y te voy a hacer vivir una experiencia inolvidable y una aventura única, te envolveré en el fuego de mi pasión para disfrutarnos mutuamente.

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  • Mas no solo las mujeres con poca estima caemos en manos de estos predadores. Su inicial galantería y sus juegos cariñosos, someten a la mujer más fuerte. ¿Sabes por qué?, la contestación como vas a ver en este post está en la bioquímica, no en los méritos del narcisista.

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  • Llámame y cítate conmigo. Yo me encargaré de transformar nuestra cita en un oasis cargado de placer y lujo. Te espero. Besos.

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