Te deseo. Quiero tenerte en mi boca. ¿Deseas una mamada, amor? Es lo que quiero hacerte esta noche ya antes de irnos a dormir. Sé que te agrada y que te agradará lo que te voy a hacer, ya verás. Sólo te pido que me guíes y me asistas, si más veloz o bien más lento: márcame los tiempos, amor. Deseo que te corras en mi boca, esta noche. Pasé gran de mi tiempo meditando, formulándome preguntas como ¿por qué razón solo conmigo se muestra indiferente? o también ¿qué tienen aquellos hombres que no tenga yo? Hasta que un mal día, en soledad, me percaté de que, efectivamente, yo no era como los otros hombres. Me sentía feo. Hubiera sido mucho más fácil que ella me afirmara ‘me agrada alguien más y no por el hecho de que eres feo’. Yo creo que de esta forma no padecería tanto. O bien simplemente no decirme nada y destrozarme el corazón saliendo con otro hombre. En lugar de eso, el intercambio de miradas y los encuentros casuales me daban a comprender otra cosa.
No hay vuelta de hoja: los extraños tienen su encanto. Saliéndose de lo trillado, consiguen, si no cautivar, sí al menos llamar la atención. Y llamar la atención es, no lo olvidemos nunca, una de las condiciones que deben cumplirse para que se pueda generar ese pequeño milagro al que llamamos ligar. ¿Podemos sugerir nuevamente que las parejas ocupadas combinen el embellecimiento con la satisfacción sexual? Hazlo afeitándose los pubes. Nada afirma caliente como un arbusto recortado. ¡Hace que el sexo oral sea considerablemente más emocionante y considerablemente más ordenado!
Estudiante y, al mismo tiempo, maestra; alumna y profesora; estudiante de Ingeniería y maestra del placer. De esta manera es Paula, esta delgada y sensual escort que combina sus estudios de Ingeniería con el ejercicio de su gran pasión: el dar y percibir placer, el disfrutar de encuentros sexuales con caballeros que sepan valorar la compañía de una mujer como ella. En Paula todo es natural, desde el tacto de sus pechos hasta la franqueza de su trato. Simpática y desenfadada, cariñosa y candente, Paula te ofrece un variado catálogo de exclusivos servicios eróticos para que puedas sentirte protagonista absoluto de una intensa y también inolvidable aventura erótica. ¿Vas a perder la ocasión de gozar de la compañía de una mujer de esta manera?
En mi tiempo libre soy modelo publicitaria y acompañante de gran lujo
Como puedes ver, crear y mantener tu marco de que eres el premio no es algo tan bastante difícil como semeja, sencillamente debes ser coherente con lo que piensas y lo que haces, el único inconveniente es que deberás calibrarlo, esto es, posiblemente lo que a mi me funciona a ti no te funcione o bien del revés pues todos somos diferentes pero lo importante es que te quedes con la idea y con la forma de comportarse, por el hecho de que así es como se comportan las personas Alfas, un alfa no se queda parado mirando a las chicas pasar y sintiéndose un frustrado por no tener valor para entrarlas y eso amigos, lo saben las chicas. Con su inigualable sabiduría, la naturaleza nos proporciona el instrumento perfecto para corregir la anterior situación. Este instrumento es el pene y su poder. Una penetración profunda y larga del pene es, de hecho, la mejor forma de restablecer tanto la polaridad masculina como la femenina. Parece increíble, mas el balano actúa tal y como si fuese un imán de alta sensibilidad que entrara en el campo imantado del polo femenino. Esto ejerce un fantástico efecto sobre las tensiones acumuladas en la vagina, precipitando de múltiples formas su descarga o dispersión; al tiempo que la zona empieza gradualmente a transformarse hasta producir deliciosas energías femeninas. Con esto se fortalecerían ambos polos. Como una derivación natural de este proceso de rehabilitación de la vagina, la sensibilidad, la flexibilidad y la consciencia también volverían al pene. Por culpa de malentendidos, abusos y mala utilización de su fantástica antena viril, los hombres asimismo han acumulado tensiones y pesares. Estos trastornos han conducido a que los hombres tengan dos comportamientos extremos en el campo sexual: el primero de ellos es la eyaculación precoz, seguramente debida a las muchas tensiones acumuladas; y el segundo es la impotencia, esto es, la carencia de contestación o de sensibilidad en el pene producida por una atrofia sexual. Ambos desequilibrios pueden solventarse si se suprimen las tensiones amontonadas en los genitales del hombre.
Al no existir eternidades para los humanos en su concepción original debiésemos perfeccionar nuestra intenciones, observemos el número de divorcios, casamientos por interés o bien por ilusión ¿Para que se casan si se van a divorciar? Si lo supieran les aseguro que no lo hacían. Luis XIV de Francia, el Rey Sol, que, entre otras cosas, solo se bañó en un par de ocasiones a lo largo de su vida y siempre bajo prescripción médica y que tenía la costumbre de entregar audiencias sentado en el retrete real, frecuentaba demasiado la cocina de palacio, mas no con fines gastronómicos, sino más bien para mantener relaciones íntimas con las chefs y camareras.
Si un hombre lo hace, se le está dando señales a la mujer de que él se siente intimidado por ella
Pasión y también ilusión. Cada uno ha de buscar lo que realmente le apasiona, poder tener un sueño tan esencial para integrarlo en la propia vida. Eso da suficiente energía para superar los obstáculos que vayan apareciendo con el pasar del tiempo. Cuando verdaderamente algo te apasiona acabas contagiando a los demás de algo positivo, y con ello se logra dar valor al propio ambiente. Si cuentas con algún género de agenda con pantalla lumínica y teclas, puedes establecer un diálogo como lo harías en una conversación ordinaria. Lo único que debes hacer es pasarle el aparato para que responda, manteniendo así un diálogo muy cómico. He visto parejas que tratan mejor a sus mascotas que a ellos mismos, y esto meridianamente se debe a rabias y problemas acumulados, pero asimismo puede darse por falta de amor. Y si no hay amor, ¿para qué exactamente nos marchamos a relacionar?. Yo soy una convencida de que todos y cada uno de los días y cada momento, escogemos a nuestra pareja, no por haber hecho una promesa de amor de por vida voy a sostener la relación. La relación la mantengo por que todos y cada uno de los días lo decido, no corresponde a una decisión del pasado, de meses o bien años atrás. Es una resolución actual, del instante presente.
Simpatía y belleza llegada de Brasil
Decir elegancia, saber estar, femineidad y sensualidad es decir mi nombre. Tengo por nombre Claudia Dalmau y, en el mundo del acompañamiento, soy una dama genuinamente top. Brillo en todos los ambientes con mi físico y mi personalidad. Uno y otra forman un combinado irresistible. Disfrutar de mi compañía es zambullirse en un océano en el que todas las experiencias y sensaciones vividas son tan placenteras como inolvidables. Quien me ha conocido y está condenado a estar lejos de mí siempre echa de menos mi dulzura y esa forma tan cálida y pasional de tratar a mis acompañantes cuando me siento en un entorno amable y educado.
El coito es la práctica estrella del Modelo. Mientras que nos masturbamos, nos leemos unos a otros pasajes eróticos o bien observamos cuerpos desnudos, somos seres improductivos, no nos reproducimos. Por este motivo el Modelo coitocéntrico ha hecho de todas y cada una de las prácticas unas modalidades de calentamiento, preparatorias para el enorme objetivo final: la penetración. En la consulta entraban los dos, honestos, abiertos al cambio, deseosos de solventar aquello. Si bien la cara de ella dejaba traslucir una preocupación real por el problema de su marido, un gran desconcierto y una dosis de rabia, enfado y también irritabilidad ¿Por qué no deja de hacerlo y ya está? Parecía preguntar su entrecejo fruncido y sus manos algo tensas cogiendo al último bebé que habían tenido y que no deseaban dejar con la enfermera.
Ni somos Marlon Brando ni estamos rodando El último tango en la ciudad de París
Conforme los médicos taoístas, los inconvenientes de erección no solo están causados por cuestiones fisiológicas o psicológicas, asimismo pueden estar producidos por problemas energéticos, en concreto por carencia de energía sexual. La complejidad para lograr o bien mantener la erección ha de ser entendida como consecuencia del cansancio masculino a nivel físico y sexual. Muchos hombres mayores que no han conservado su semilla sufren este inconveniente. La cura para la impotencia radica en cultivar la energía sexual y evitar la eyaculación a toda costa. Como mencionamos en el post 5, el hombre es generalmente más yang que yin. A medida que se excita se hace poco a poco más yang, pero tras eyacular se transforma en yin. Los hombres que tienen problemas de erección deben hacerse más yang y por tanto deben evitar la eyaculación con más determinación que el resto.
Empieza a acariciar su pecho, su abdomen y sus muslos. Haz que su pene vibre entre tus pechos. Para ello, suspira en voz alta. Tus pechos vibrarán y esa vibración se transmitirá a su pene. Que tu corazón retumbe en su cipote. Más allá de esta posibilidad de elección de la que puede gozar la pareja sexual, esta postura puede ser muy estimulante a la hora de tener sexo de pie. Para ejecutarla, la mujer, de pie, debe plegar su torso y ofrecer al hombre tanto su vagina como su ano mas sin llegar a colocar las manos en el suelo. Al tiempo, la mujer debe tener las piernas abiertas para, de ese modo, permitir una penetración más honda.
Lo espero con ansias, Herb, mas quiero dejar en claro que esto no será una aventura de una noche. Comprendo que me rechace inmediatamente, pero si puedo engancharla, si la pongo en marcha sabiendo todo lo que me has dicho sobre ella. Quiero sobrepasar sus límites, Herb. Verdaderamente deseo que sea mi puta. Nada acaba ahí. Las manos de él vuelven a ponerse en marcha siguiendo la senda del cuerpo de Mónica. La lengua corrobora que sigue las pistas precisas para hacerse con ella. Para tenerla y poseerla. A fin de que cada centímetro de su piel recuerde el paso de sus manos. Centímetro a centímetro, milímetro a milímetro. Divirtiéndose en sus cuevas, acompañando cada caricia con más y más besos, a fin de que le deje hacer. Para entrar en ella en ese instante en el que todavía no ha dejado de manar el testigo de su éxito anterior. Aún se puede sentir el flujo resbalando hacia la sábana cuando él entra. Mónica contiene la respiración al sentir que la ocupa por completo. Los vaivenes de sus cuerpos se regulan en una coreografía precisa que deja que la polla entre y salga de su interior. Empujones gozosos que brotan desde dentro. arriba, ella debajo. Ni una palabra, no hace falta. Ellos charlan con sus cuerpos que se entregan mutuamente. A Mónica le gusta todo ese silencio acompañado únicamente de los jadeos de ambos, gemidos cada vez que la verga se hunde por completo. Ahí está, ahí la tiene. Esas manos que le apartan el pelo de la cara para dejarle la cara despejada, que no paran de tocarla y mimarla. Manos que acarician sus senos, que cautivan separadamente cada uno de ellos. Manos que son testigo de la lisura de su piel, que comn suavemente cada porción de carne que recorren. Sin parar. Dentro; fuera. Un tamaño perfecto. Para sentirla precisa cuando entra golpeando con la punta el final del recoveco del cuerpo de Mónica, notarla también cuando sale cogiendo fuerzas para retornar de nuevo dentro. Apenas comienza a correrse Mónica cuando el hombre acelera sublimando su propio placer para descargar sobre su tripa un chorro de semen caliente que esparce sobre ella.
La percepción mejorada
Los tántricos piensan que una forma esencial de lograr la conciencia es amarte y admitirte a ti con lo que eres y con lo que representas. Esta conciencia entonces estimula tus poderes espirituales y sexuales superiores. Ciertas fantasías realmente salvajes de los manuscritos orientales sí tienen un punto: la mujer a horcajadas en las imágenes de Mughal que está balanceando lámparas, cabezas y hombros en sus manos o disparando a un blanco con un arco solo demuestra que puede traer al hombre. con sus músculos vaginales solos mientras mantiene el resto de su cuerpo inmóvil (ver pompoir). Otros son místicos o simplemente gimnásticos. Todas las posturas que mostramos son prácticas (y han sido probadas para el ajuste, si no para el orgasmo) y más o menos gratificantes según la inclinación. Lo que sugerimos es que para cualquier truco nuevo, organice una sesión de práctica con anticipación. El instante de aprender nuevas figuras no está en la pista de hielo o bien en la pista de baile. La razón más frecuente por la que una elaboración que ambos querían, ya sea una postura muy elegante o bien alguna evasión como la esclavitud,que debe configurarse de manera veloz y eficiente: decepcionante es el intento de utilizarlo en el amor real y conmovido desde el frío, a fin de que pierdas el hilo y desees no haberte molestado o culpar a quien lo haya sugerido eso. El resultado frecuente y lamentable es nunca volver a intentarlo.
Me hace sentir mucho mejor acerca de mi impotencia al saber que cuando menos mi esposa goza haciéndome intentar compensarla con un servicio más ágil de otras formas, especialmente haciendo todas las labores familiares. A las mujeres les chiflan los detalles, quizá es algo que ya hayas escuchado, eso es ciertísimo. Algunas veces y toda vez que puedas hazle un detalle; regálale un presente, envíale flores a su trabajo o donde este, quizás un perfume, una prenda de vestir, siempre algo en la medida de lo que puedes.
El deseo de lo irreal de la fantasía impide al individuo, no solamente reconocer y aceptar a su cónyuge como es, sino más bien asimismo aceptar las tareas vitales que corresponden a la etapa del programa arquetípico en el que se encuentra anotado. A menudo no acepta adecuadamente, ni entiende absolutamente los papeles que debe desempeñar: de esposo o bien de esposa, de padre o madre, de distribuidor, de educador, de contención, de ser creativo, de protección, de ser un centro regulador, etcétera. Podemos cuestionar la poca responsabilidad con la que el adulto desempeña sus papeles, mas, como afirmó un profesor nadie cambia un coche por una bicicleta, no como una justificación, sino como explicación de la mayor atracción que siente por la fantasía. En otras palabras, lo que se ofrece a cambio del estado sintomático (las fantasías infantiles), es menos de lo que ofrece el síntoma.