En el momento en que haya masajeado ambas piernas, párese o bien arrodíllese por la superior de la cabeza de su amante. Frote un tanto de aceite en sus manos. Al masajear a una amante, pregúntele qué tipo de contacto, si lo hubiese, le gustaría en sus senos a lo largo del masaje. Entonces, empezando por la superior de su pecho, aplique suavemente el aceite en el torso. Apunte hacia abajo a través del pecho, los senos y el abdomen, hacia los dos lados. Deje que el golpe de retorno suba por los costados, bajo las axilas, por encima del pecho y por la superior de los hombros. Repita este golpe en muchas ocasiones, haciéndolo tan lento y delicioso como sea posible. Gradualmente extienda este movimiento deslizándose desde los hombros hasta los brazos y la espalda hasta el cuello. Cubre tanto de su torso como puedas.
Una advertencia: las lesiones en los genitales masculinos pueden tener graves repercusiones. Es una gran idea dejar que la pareja en el extremo receptor tenga la última palabra en cuestiones de dolor y sensación. Un hombre, aun uno que está excitado y ansioso por agradar a su pareja, sabe cuándo algo se siente mal con sus genitales, y eso quiere decir que necesita una señal de que las cosas han progresado más allá de los niveles tolerables. Siempre debes tener un safeword. Además de esto, me gusta utilizar este procedimiento de comunicación: le digo a mi compañero que, mientras que se divierta, debería llamarme Señor y, si precisamos charlar, debería llamarme por mi nombre real. De esa manera, el flujo de la comunicación puede proseguir sin que las cosas se detengan. El buen seductor sabe cuando retirarse. Si tienes indicios que la persona está con doble agenda o está interesada en todo menos en tu habla, debes armar un plan de retirada efectivo. Esta guía es infalibel; si la persona no está interesada quizás es momento propicio para un movimiento de retirada parcial o bien completa.
¿Que cuántos años tengo?
Millones de mujeres solteras, divorciadas o bien viudas e inclusive una que otra casada o con pareja, salen diariamente a la calle para trabajar, realizar sus labores familiares e incluso a divertirse un rato. Pero en nuestra sociedad sexista que nos impone a las mujeres estar con un hombre que nos represente, nos han enseñado a pensar que debemos localizar un hombre que nos acompañe, nos brinde estabilidad, nos haga sentir protegidas y que además nos satisfaga sexualmente. Muchos creerán que esta afirmación simplista, sexista y poco retributiva cara los intereses reales de las mujeres; está fuera de todo contexto de la sicología como ciencia. Si bien esta aseveración puede no ser completamente cierta, En Sostén y Pantaletas trata sobre una gran cantidad de comportamientos de las mujeres que nos llevan a buscar y a continuar en pareja. Mi pretensión en este texto jamás será caer en diatribas asociado filosóficas del deber ser, ni mucho menos caer en aseveraciones sexistas o sexistas sobre estereotipos de mujeres que procuran un hombre para satisfacer sus necesidades. Al contrario me considero una mujer feminista en el sentido real de la palabra, creo de manera profunda en la igualdad y la equidad de género y trabajo cada día para lograr una sociedad más justa y responsable en lo que se refiere a la división de roles de género y a su comportamiento sexual. Soy mujer, madre, esposa, sicóloga y sexóloga sin prejuicios (o por lo menos lo intento), que trata de buscar una explicación a ciertos comportamientos que muchas mujeres siguen teniendo hoy en día en lo que se refiere a las relaciones de pareja y al sexo.
No se podían adquirir on line
Estos papeles recios del M.A.S. tradicional y conservadores, son como moldes recios sobre lo que debes ser para poder sentirte un verdadero hombre con prestigio, o para ser una mujer de prestigio. En tanto, bastantes personas no caben en estos moldes, y eso les deja una herida. Al no caber en estos moldes, en ocasiones se desarrolla una tendencia inconsciente de tratar de seleccionar el otro molde: hombres que imitan los modos y maneras que se consideran más de mujeres, y mujeres que, inconscientemente, adoptan rasgos, formas, y estilos más masculinos. ¿Y qué es lo que vemos entonces? Que quienes se distancian del estereotipo de género que les toca según el M.A.S. hacia el otro género, muy, mas muy de forma frecuente, se enamoran de quienes se han distanciado también, pero en la dirección opuesta. Hablamos de mujeres que han adoptado modos, rasgos, más masculinos y que procuran para sí hazañas más masculinas, que se enamoran de hombres que han adoptado asimismo por este deseo inconsciente de elegir el otro molde donde las propias hazañas caben mejorrasgos, y formas, más femeninas. Siéntese a su lado izquierdo, al lado del corazón, y apoye suavemente su mano derecha sobre su corazón y su mano izquierda sobre el montículo púbico. Imagine la energía de una mujer que fluye desde el corazón hacia los genitales (al paso que el flujo de energía de un hombre se invierte, fluyendo desde sus genitales hasta su corazón). Mírense a los ojos y respiren juntos hasta que sientan una conexión. Recuerde, esta es la primera vez en la secuencia de masaje que los genitales están expuestos. Aprueba su cuerpo, expresando aseveraciones semejantes como: Este cuerpo me genera mucho placer. Qué regalo para mí .
Conocer, cultivar y desarrollar competencias complementarias
La continuidad sexual está dada por deseo, excitación y orgasmos. El deseo provoca pensamientos, y/o actividad sexual, los cuáles producen excitación. La excitación incrementa el flujo sanguíneo en la zona genital. Esto es, es el factor que facilita la erección en los hombres, ensancha los labios vaginales en las mujeres, expande el clítoris, y facilita la lubricación. Por su parte, también influyen en los orgasmos. La excitación acelera el pulso cardiaco y aumenta el ritmo de la respiración. No obstante, no genera nada en el sistema fónico de la mujer. Esto es, que el grito de las mujeres cuando llegan a los orgasmos es un mecanismo adquirido y aprendido del modelo eyaculatorio de los hombres. El grito en la mujer es el modelo fónico equivalente al proceso de la expulsión del semen. Llegar a un orgasmo no implica necesariamente chillar. Esto ha confundido a muchísimas mujeres, que han creído que si no gritan no han llegado al clímax. Siendo que el clímax no solo responde al modelo del éxtasis, asimismo puede ser una placentera relajación. La excitación intensa interviene tanto en los clímax como en la eyaculación.
Privar absolutamente de los sentidos y, al mismo tiempo, conseguir la inmovilidad total de la parte sumisa: esas son los objetivos de la momificación, una forma de bondage con reminiscencias del Viejo Egipto que lleva a la parte sumisa a un estado en el que solamente se siente es, en muchas ocasiones, la propia respiración. La persecución de un sentimiento de vacío en el que el tiempo parezca detenido es el principal objetivo de esta práctica BDSM que debe ser efectuada extremando al límite las precauciones. Recuerda que con tus compañeros y colegas no has de ser demasiado borde, y mucho menos con tu jefe, mas no pasa nada porque crean que eres raro, conque echa mano nuevamente del Kit del virginista, y asiste al evento con tu suéter de cuello alto y habiéndote restregado ajos por todo tu cuerpo.